- Reducción en las incisiones; se reduce el uso de fármacos analgésicos en el periodo perioperatorio y postoperatorio.
- El sangrado es significativamente inferiorreduciéndose de forma muy marcada el número de transfusiones sanguíneas y uso de hemoderivados.
- La recuperación del paciente es más rápida,reincorporándose a su vida normal mucho antes que con otras técnicas.
- El número de estancias hospitalarias disminuyesignificativamente hasta en más de un 50%.
- Los trastornos funcionales secundarios en los procesos quirúrgicos se reducen; ausencia de incontinencia urinaria en la prostatectomía radical, reducción de la incidencia de impotencia en un 80%, etc.